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29.6.18

Experiencia de unTécnico del Agro


       El plomo, el oro, a alta temperatura se licuan dejan expuesto su pureza de forma tal que, resalta sobre lo que existe a su alrededor. Caso concreto sucedió con un personaje traído a este tema. Es un hombre de fe, de Iglesia, a pesar que, todos los pastores, curas, obispos y fanáticos religiosos están cuestionado hoy en día. Sobre estas cenizas se pone de pie este personaje. Me refiero a Monseñor(monseñor, un título honorífico) Carlos González Cruchaga fue un sacerdote católico chileno, Obispo de la Diócesis de Talca desde 1967 a 1996 y Presidente de la Conferencia Episcopal de Chile desde 1988 a 1992. 
Ordenación sacerdotal: 23 de septiembre de 1944; por José María Caro.
     Lema Episcopal: “Ven, Señor Jesús” (que mantenía en el frontis de su casa en Talca) Monseñor Carlos González Cruchaga nació en Santiago el 8 de junio de 1921. Sus padres fueron Don Guillermo González Echeñique y Doña Elena Cruchaga Tocornal y su padrino de bautismo fue su primo hermano, el Padre Alberto Hurtado Cruchaga.

Realizó sus estudios en el Colegio San Ignacio, de los Padres Jesuitas, en 1937 ingresó a la Universidad Católica a estudiar Agronomía, carrera que suspendió el año 1938 cuando tomó la decisión de hacerse sacerdote. No se puede hablar de Carlos González sin pasar por alto la Fundación CRATE en la Diócesis de Talca.
        Monseñor Carlos González, después del
73, motivado por los atropellos a la dignidad de las personas(especialmente de los  dirigentes sociales) crea el Centro Regional de Asistencia Técnica Empresarial con profesionales del agro como: técnicos agrícolas, ingenieros agrónomos, promotores, abogados, asistentes sociales y administrativos, muchos venían con experiencias de otras organizaciones del agro que el régimen terminó(Aunque al interior de esta noble institución(crate), se da el caciquismo (Persona que valiéndose de su influencia interviene arbitrariamente) o abuso de poder por parte del director, respecto del personal, se hacen despidos de funcionarios arbitrariamente, sin sumarios, sin derecho a defenderse, esto es inconsecuente con los principios de  un organismo de iglesia al servicio de los campesinos, pequeños propietarios, y pobladores rurales. El espíritu del CRATE no existe para el Director, que, con hipocrecias manipula y  se gana la confianza del Obispo y algunos curas (transformándose en vaca sagrada) de don Carlos González presidente de esta fundación.-

 CRATE,nace en 1976 para ir en auxilio de los asignados de la reforma agraria que, de la noche a la mañana se veían enfrentados a hacer producir la tierra sin contar con recursos, asistencia técnica ni crediticia dado a que el régimen militar les entregó la tierra como por venganza, era como decirles: "Queren tierra, ahí tienen tierra, trabájenla". Más de eso, el régimen envía a cada predio o asentamiento extraños personajes en carácter de interventores (más que nada eran soplones de la DINA (unidad represiva del régimen militar), éstos  tienen plenos poderes para seleccionar a los futuros dueños de la tierra, pero sin antes rematar toda la infraestructura de los Asentamientos(quedan desmantelados),nunca se supo de los dineros producto de estos remates, como la maquinaria agrícola e incluso devolver el asentamiento a sus antiguos dueños del fundo.
  Los dirigente no calificaban en la posible asignación de parcelas, se les aplicaba un famoso decreto 208(DECRETO LEY N° 208.- 1973 MODIFICA LA LEY NUMERO 16.640 DE REFORMA AGRARIA) eran tomados prisioneros, torturados, otros nunca más regresaron a sus hogares siendo hasta hoy detenidos desaparecidos.
      El Obispo Carlos González conseguía ayuda en el extranjero, dineros que se convertían en ayuda crediticia, fertilizantes, semillas para los parcelero, pequeños pobladores en ayuda en huertos caseros y crianza menor especialmente para mejorar la dieta alimenticia.

 Fue un privilegio de los campesinos de la Diócesis de Talca contar con esta fundación, o sino los daños de la anti reforma agraria habrían sido peores, como también las consecuencias para los dirigentes sociales, Sindicales y de los Asentamientos.

 La Iglesia debió haber Replicado esta acción de don Carlos González, pero no fue así...Pobres los campesinos de otras regiones del país, debieron beber solos este trago amargo de la dictadura, quedando hoy vagos recuerdos de haberse atrevido a ser dueños de la tierra, actualmente son asalariados e igual sus hijos en sus propias parcelas en mano de grandes frutícolas que ganan mucho dinero exportando todo tipo de frutas y vinos a los mercados internacionales.